POEMAS DE JUVENTUD DEL VIEJO VAGABUNDO

Fotografía de Mario Ruiz





Poemas de juventud
del viejo vagabundo













PERSPECTIVA

Vivo en una nube
Desde acá miro hacia abajo
Y veo todo desde lo alto
En esta nube camino
Husmeo la hionósfera
Me intoxico de ozono
Y el sol me acaricia sin dañarme
Acá sólo llegan los brandys más sutiles
Por una cuestión de empatía, ¿viste?
Y como no nos gusta la ambrosía
Entre otras cosas 
Comemos centollas del Pacífico Sur
Y tiernos brotes cosechados con tu sangre

Sí, vivo en esta nube
Y cuando quiero
Levanto mis misiles contra tu peste
Vil estropajo de mis siervos

Te pido que no me alteres
O caminaré sobre las cenizas de tus hijos
Incluso antes de que nazcan.


CONDICION HUMANA

Sé cuál es tu argucia:
Estar detrás de cada movimiento
De cada costumbre
Agazapada entre mis libros preferidos
Entre mis enseres
Rodando en la periferia de mi ensueño

Como si fueras un tatuaje en mis mucosas
Puedo verte en cada parpadeo
En el fondo de mi vaso
En el instante siguiente al apagar la luz
En el silencio que precede al alba

También en cada espasmo 
De mi intoxicado cerebro

Pero estoy cansado
He decidido perderte
Abandonándolo todo
Como si me quitara un traje

(Estamos hechos de viento
Jamás podrás atraparme)


ÍGNEA EPIDERMIS

Mordiendo la cabeza de una ninfa
Encontré lo que buscaba:
Una revulsiva agitación
Jamás anonadada por éticas imprecisas
Ni por culpas endócrinas
En virtual connivencia con el absurdo

Sentí que el cielo se abría
Y que podía finalmente
Degustar los confines de la euforia
Acariciar la furiosa cresta del deseo
Y vivir para contarlo

Ríos de alcaloides atomizaron mi percepción
Y me aturdieron
En espasmos sincopados

Sujeté con uñas y dientes el asombro
Por la intensidad del  milagro que se disipaba
Dejando mis manos vacías de espacio
Y algo más que el Louvre
Grabado a fuego
En mis retinas

No sería un hombre si no hubiera acometido nuevamente
Mis huesos descoyuntados continuaban la batalla
Monigote de fuego
Atrincherado en mis genes más animales
Ardí con fiereza

Otra vez me atornillé a mis sentidos
Con sed enloquecida
(Sabiendo que la abstinencia luego
Sería tan insoportable...)

Ígnea epidermis
Derritiendo el  iceberg que la sustenta
Sobre las gélidas aguas de lo cotidiano


CHAMPAGNE

Un tenue halo de escarcha se ha formado
Sobre la botella empañada
Lo que presagia
La voluptuosidad de su contenido
Bien “frapée”
Que próximamente
Y más tibio
Recreará la alquimia del placer
En mi cerebro
Reavivando la paradoja:
¿Puede una víscera
-Una masa de materia muchas veces hedionda-
Traducir la lujuria de cepas tan claras
Y transformarla en ideas
Que difícilmente denoten su grandeza?

La travesía descompone su itinerario
Para que la sorpresa tome el comando
Nadie podrá desarticular su reflejo
En el momento preciso

Alerta entonces
Sospechamos de lo frugal
Y abrimos pantagruélicas fauces
Hematófagas
A la sangre del Dios nuestro señor

Sangre de sol:
Tallos de vieja estirpe europea
Empernados en valles mendocinos
Nos la devuelven
Y cada trago
Agrega una pincelada magistral
En el cuadro de la realización hegeliana 


FRAGMENTOS DE TU ANGUSTIA

Si por mí fuera
Recalaría cada día en tu calvario
Y me flagelaría con ahínco
Sólo para complacerte

Aún más, clavaría pajas en mis uñas
Recordaría en detalle 
Todas las veces que me quise morir
Mis grandes vergüenzas
Y la todopoderosa miseria que a todos alcanza

Si por mí fuera
Me alimentaría cada día
De tu neurosis
Me concentraría en la muerte
Y sus sucedáneos
Y le daría la espalda a la locura

Pero sucede
Que el vacío me reclama
Tozudo en su ingravidez
Insuflándome el sueño de Ícaro
Y desmembrando mi silencio
En diversos fantasmas
Que perciben simultáneamente
Fragmentos de tu angustia.


TENSO MEDIODIA

Tenso mediodía
Pulimentado por aguas duras
Archidispuesto al sacrificio
Mas siempre susceptible a las delicias del camino
Tan azarosas como las vidas pasadas y las que serán
Y los nudos del bambú
Y los cobayos de Menguele
-Sumidos en una cifra de unos cuantos dígitos
En un desgraciado intento de racionalizar
La magnitud del flagelo causado
Por los psicópatas del poder-
Tenso mediodía

Aires de somorgujo
Inducen a una lectura contrapicada de la superficie
Atesorando modestias como gemas de cultivo

Según los céfiros del tiempo
Y a tenor de la mansedumbre esclarecida
Que todo predador honrado merece

Sin embargo
Calan la inconcebible bayoneta
Desnudando así su debilidad estructural
Y nos rebajan a meras bolsas de entrenamiento
Que cuelgan de la viga maestra
Atiborrándonos de nimiedades 
Como se corteja a la oligofrenia
Fumando en la santabárbara
Tenso mediodía
La polinización perturba los ánimos
Y se vulgariza en los lujosos bunkers magnicidas
Por violencia o por hambre

Recostados en ciencias antinaturales
Desguazan los fundamentos de la vida

Destemplan el acero de Hefaistos
E insumen cerebros para la gran holganza
Genios para urdir plusvalías indecentes
Y calificados guardianes a todo evento desechables
Que esperan por sistemas nerviosos que carcomer
Desmembrando el tejido perceptual de la  tierra
Para rellenar sus intestinos de inmundicia
Y desandar su animalidad 
En franca involución biológica.

Comedido watusi
Danzo en silencio coreografías sagradas
En este tenso mediodía.


ANFISBENA
( 7 de 7 )

Una rigurosa cronología en modo alguno
Podría haber justipreciado la angustiosa espera
A la que fui sometido por dos de tus ojos
En trance de obnubilarme
A través del embelesamiento de mi sangre
Que olvidada de sí misma
Fatalmente me convertía en presa

Mi temperamento frontal
Ingenuamente antropocentrista
Aceptó confiado los escarceos propios de la esgrima amorosa
Y asumiendo aires de torero
Intenté verónicas a tus enjundiosas embestidas
Me arrodillé y te di la espalda en un desplante
Sólo para encontrarme con tu artero doble  juego de pitones

Jamás pude prever
Tu impecable ambigüedad sinérgica
Y ahora  que puedo discernirte en tu real forma
Advierto que tal vez esa dualidad
Constituye el estandarte de tu gloria
Y como irremisible contraparte
Establece para siempre mi condición de ilota

Es así que jaqueado por venenosas dentelladas
Me encontré ejecutando el baile del ahorcado
Sin la lúdica velocidad de la mangosta
Sin los aflautados barroquismos del encantador
Sin un suero que difiera mi muerte sine die
Y sobre todo
Sin voluntad asesina para el doble descabezamiento

Sorbí de tu colmillo una leve cantidad de peste
-Mientras veía al infierno concentrarse en tus córneas-
Escuetamente ilusionado
En una atenuación medicinal de sus tóxicos efluvios
Entre escalofríos
Mi terror permanecía intensamente conciente
De otra lengua bífida que husmeaba los pelos de mi nuca

En mi creciente paranoia jamás supe si avanzaba o retrocedía
Apelé a un recóndito romanticismo
Pergeñando poemas amorosos
Totalmente construidos de versos palíndromos
Intentando así adecuarme a tu índole
(Como si con un par de ramplonas ocurrencias
Pudiera domeñar siquiera un poco a tu letal instinto) 

Hoy supongo que habrás vuelto a ser leyenda
En tanto yo –no sé cómo- salvé el pellejo
Y he retornado al mundo histórico
Ese que aparece en tanto que desaparece
A Nada temo. Mas en mis sueños
Recorro y recorro tu desierto irredento
Buscando al menos una de tus fauces para resarcirme.


EN  LOS  MAUSOLEOS  DE  LOS  ANGELES ONANISTAS

Mi herrumbrada brújula
Parece haber perdido su norte
Ya que he llegado a estos mausoleos 
Habitados por ángeles terribles
Que mascan tabaco
Arrojan escupitajos por doquier
Y mascullan obscenidades
Mientras se cuelgan del propio pene
tensan sus cuerpos
Y baten sus alas 
En furibundos orgasmos casi permanentes

No sé si se comunican entre ellos
Sólo los oigo repetir aquel monótono aire soez
Para sí mismos

Tan preocupados están en autosatisfacerse
Mascar
Y escupir
Que parece que hubieran pasado una eternidad
Ejerciendo su aleteante onanismo
(Tan es así
Que se me aparecen como una usina de lascivia
Para los mundos inferiores.
A veces la excitación los impulsa tan alto
Que casi se pierden de vista
Y uno podría creer que han desaparecido
Si no fuera por el creciente rumor de sus jadeos
Y algún que otro salivazo hediondo
Que cae desde allí arriba

Pasé mucho tiempo observándolos
Tratando de encontrar la más leve fisura 
En su existencia homogénea
Intentando deducir,  por ejemplo, 
Si utilizaban o no fantasías
Para estimular su incesante actividad erótica;

Pero no fui capaz de arribar a conclusión alguna
Ni de penetrar en su hermética índole
Pues me vi urgido a abandonar aquellos extrañísimos parajes
(Ya que habían comenzado a brotar de mis omóplatos
Unos incipientes brotes plumíferos

Y poco a poco
Iba concentrándome obsesivamente
En una cuarta por debajo de mi ombligo)


SE DICE POR AHÍ QUE HE MUERTO

Se dice por ahí que he muerto
Y tal vez sea verdad, no sé
Es solo que aún siento mis piernas inclinarse en los caminos
Las pupilas encendidas
Los dolores en el cuerpo y en el alma
La necesidad de hablar
Las estéticas celestes a ciento ochenta grados
La liturgia de mi extraño credo pagano
Las suturas que tiran en cada elongación
Las ansias de estar ebrio
Los ecos de los cuentos que alguna vez he contado
Lo sobrecogedor del silencio
Las manos vacías, gracias al cielo vacías
Lo tenaz de las preguntas sin respuesta
Y aferradas a mi carne como anzuelos
Las utopías

Se dice por ahí que he muerto
Y tal vez sea verdad, no sé
La cosa es que como una suerte de crucificado
A quien han arrebatado su cruz
Me despojo incluso de los clavos
Y del dolor y del escarnio
Y observo en la distancia a mis ojos
Que tan lejos me llevaron alguna vez
Tan lejos que ya casi ni puedo soñarlos

La muerte es efímero alimento
La vida un suceder continuo de señuelos
Y lo de en medio un híbrido estupefaciente
Voraz, excéntrico, lúbrico y equidistante
Un tironeo loco entre ambas vorágines
Del que me he salido

Tal vez sea cierto entonces eso de que he muerto
Y también posible que no me haya percatado
Ya que todo cuanto me ha sido grato algún día
Viene hacia mí dulcemente
Y camina a mi lado con pisadas tenues
Como la tarde


CONSIDERACIONES SOBRE EL HILO Y LA MADEJA

He andado un camino
Sólo uno y siempre el mismo
He saludado a las mismas caras
He mirado una y otra vez
Los mismos escaparates
He evitado los mismos automóviles
En las mismas calzadas
Y todo alrededor sin embargo
Sentía lo mismo y de igual modo
Y no era un capricho hilozoísta
Ni una obtusa simplificación imbuida de animismo
Eran simplemente los distintos canales
Simultáneos y concomitantes
Que yo tan torpe
Jamás pude hacer confluir

Y eso que de eso se trata


LASTRE

Demasiadas palabras
Para enfrentarme con Anubis
Demasiado peso fonético en mis aurículas
Excesivo disloque melódico en los ventrículos
Pero de Morgani
Todo para mí es tan equívoco
Como la glosa de la anatomía
Debo dejar caer unas cuantas hojas de mi boca
Hojas impresas
Otoños de Gutemberg
Antes de enfrentarlo


JAZZ BASS

Cierta vez fui un músico
Cargaba como un ataúd el estuche del Fender Jazz Bass
A veces
Más que cargarlo
Me aferraba a él como a una tabla de salvación
Luego in situ extraía el instrumento
Atenazaba el diapasón
Con dedos que alimentaban artrosis profesionales
Barbotaba sonidos graves
Matizando en los fills
Y el infinito
Fuera de ello
Dejaba de tener pertinencia
Ahora cargo otro sarcófago menos grato
Éste cuya tapa descubro ante vosotros
En él
El éxtasis se comprime hasta quedar congelado
Nada fluye, nada se sucede
Todo es aparente
Objetivo
Y por tanto
Intempestivamente arbitrario
Como un vicio
Compulsivo y alienante
Del que ya jamás podré librarme
Busco a tientas la salida de esta oscura celda
Aún sabiendo que es en vano
Pero por suerte la música
Siempre halla un resquicio por donde filtrarse
Para acariciar mis oídos mis dedos y mis labios
Es entonces cuando finjo que poetizo
Cuando en realidad algo en mí o fuera
Está cantando


CORTE DE LUZ

El cebo hirviendo hace crepitar la llama
Del cabito a punto de caer a freírse
Rodeado por el capullo de fuego
Que se le aferra como un alma
Las trémulas imágenes rojizas
Parpadean mientras funden lentamente a negro
Milagro de nervios ópticos esforzándose
Por enfocar la esencia de una oscuridad mansa
Lánguida
Como un asilo para fiebres cerebrales
El whisky se apodera de las imágenes
Y las proyecta en una fuga como digital
El fundido se hace caótico y entreveo una
puerta
Justo cuando la flama se apaga como un alma
El viento y la lluvia afuera
Enfrían los rescoldos
Mastico un cubito
Ahora
El azul auditivo de las aguas que arrecian


QUIZÁS NI ÉL SEPA

Sabe dios y quizás ni él sepa
Cantar en fa sostenido menor
Como las aves
Pues para eso las hizo

Reír cataclismos
Como los ángeles
Creados para expresar su alegría

Morir por una utopía
Como los héroes
Que vuelven a él en largas sublimaciones

Meditar trascendentalmente
Como los santos
Que saben germinar su partícula

Dispensar masacres
Como los genocidas
Hechos al efecto de simular asesinatos

Sabe dios y quizás ni él sepa
Ejecutar la creación
Como nosotros
Que para eso lo creamos


CRASH

Alguien suspira en una lejanía drástica:
El draconiano imperio espaciotemporal
Agita en mí un mar de sobresaltos

Mientras
En invariable desvanecimiento entrópico
Sostengo una mirada que a contrario
Va haciéndose cada vez más densa
Equilibrio por sustracción
Liberalismo fatal de la física
Crashs y bangs indispensables onomatopeyas
Imágenes de hambre
Navegando en su eterna noche brahamánica

Alguien suspira
Siempre es demasiado lejos o demasiado tarde
Es vano implorar con lengua microcósmica
Lamentos infinitesimales
Es vano
Reducir la angustia a su mísero justiprecio

Jalo lentamente del gatillo


SO THAT...

Puedes creer que la poesía es esto o aquello
Puedes creer también que se ajusta
A ciertas y determinadas pautas
Puedes creer que se escribe ebrio, o loco,
O ebrio o loco de tristeza o pasión
O según lunáticos influjos
O según inspiraciones fatuas
O de las otras
O transido de anhelos metafísicos
Militantes
Eróticos
Formales
Románticos
Incluso risueños, por qué no

Pues bien
Has perdido un tiempo precioso
Y lo has perdido tal vez para siempre
Ocurre sencillamente
Que has estado tomando las medidas
Del molde que ya no podrás rebasar
A menos que las olvides
De golpe y por completo


DEMASIADAS NÓMADES NOCTURNIDADES

Me he propuesto ya no pontificar blasfemias
Hacer gala de un temple claro y reticente
Comedido quizás
Auscultar meticulosamente el hielo
Antes de afirmar el pie
Ceñirme a los cánones que exigen ton y son
Levitar liviandades con cierto dandismo
Limpiar la vajilla y ajustar mis recetas
En orden a hacer exquisito todo cadáver
Para que puedan tomar su sopa de letras
Los gourmets más refinados
Sin que algún insecto o condimento excesivo
Desaliñe al conjunto en sus prístinos paladares
También decidí acariciar los parámetros
Con fervor propio de un tallador de diamantes
Lamer la bota de los clásicos
Disparar caballerosamente
Sobre mi glosa tu glosa nuestra glosa
Sin una actitud verdaderamente revolucionaria
Celebrarme profunda pero discretamente
Cual quien es capaz de ver y de comentarlo
Sin vestigios de miseria o desesperación
Que no sean estéticamente controlados

Aquí está, os lo dejo
Y perdonad, creo que acabo de vomitarlo


ES IMPOSIBLE PENSAR ÁLAMOS SIN VIENTO

Cuando revuelvas el caldero y nada te resulte suculento
Cuando la fiebre sea una garra saliendo de tu plexo
Cuando maldigas las horas los minutos los segundos
Cuando lo diáfano pertenezca a otro sistema y no te toque
Cuando te sea imposible decir esta boca es mía y acallarla
Cuando tus naves ardan y no concibas cómo seguir adelante
Cuando no veas que al debatirte haces más cruenta la guadaña
Cuando reces y algo en tu interior te diga que es en vano
Cuando famélico y tembloroso
Cuentes los granos de arroz que van quedando
Cuando leas en el diario que el invierno es apariencia
Cuando llegues a ofrendarte ante cada oscuro comando
Cuando el amor te sirva su amargo plato de codicia
Cuando toda sensación te llegue transfigurada
Será tiempo de que empieces a pensar
En desintegrar de una vez por todas el todo y el cuánto


EL CIELO PERMANECE

Y el cielo permanece
A pesar de los cosmos minimales que destilo
Y que ateridos de magnitudes
Discurren tras mis párpados
Ellos
A modo de pantalla cinemascope y technicolor
Acotan el milagro a su máxima expresión
Y dan a esta suerte de vislumbre délfica
La perfecta dimensión infinitesimal
A todo respecto
De modo que los presagios
Sostienen sin mayor esfuerzo
Sus ínfulas de amplio espectro
Es lo que soy
Y lo que no
Especie de capullo
Eyaculando nebulosas frías y efímeras
Explosivas en origen y en franca dilución
Como una partenogénesis de la nada
Me sirvo con desprecio
Bebo con fruición
Y sin embargo
El cielo permanece
Estoy perfectamente solo y borracho
Aspiro guirnaldas de nubes
No tengo pasado y el futuro es móvil
Como las ánimas
Me planteo guerras por sexo o por hambre
Agito la codicia
Y veo a la carroña restregarse
Devasto el humus
Doy oportunidad de luz al magma
Escupo cenizas, luego las inhalo
Y veo a la carroña restregarse
Pienso fumarolas
Que vientos nucleares luego arrastran
Descarto atavismos ribonucleicos
Desquicio formalmente las substancias
Entonces
El afán es parte de una historia
Que ya no poseo
Y el futuro
Es una piedra en el zapato
Cuando es mi único anhelo
Caminar sin anclaje pretérito o por venir
Caer zaherido por mis propias flechas
Agotarme en el ejercicio de volver a arrojarlas
Plantar un beso en la frente de la muerte
Una palmada en el omóplato de la parca
Nunca es suficiente el dolor
Nunca tampoco el afluente de blanca esperma
Nunca los gritos esos rumores de la sangre
Nunca las lápidas
Nunca el abortivo ejercicio de la palabra
Nunca el silencio de esporas calcinándose
Nunca la comunión delicadamente impía
Desmesurada de ansia
Tal vez deba excusarme
Estoy ebrio
Y es que no puedo
Dejar de ver a la carroña restregarse
No puedo tampoco dejar de restregarme
Y sin embargo
El cielo permanece


EL PESO DE LA CULTURA

El peso de la cultura cuelga de los tendederos
Las mortajas deben estar blancas inmaculadas
Axiologías de jabón inteligente
Que discrimina manchas que devorar
Pontífices esclerosados
Guerreros santos
Guerreros contantes y sonantes
Misiles dorados entre pústulas violáceas
Tiaras y gangrena
Budas devastados a golpes de odio virtual
Monoteísmos monotemáticos
Imponiéndonos de carne y odio
Cual maldición ignota por tanto irredimible
Protozoarios hipertrofiados
Víctimas de traumas psíquicos pueriles
Aunque determinantes
Pandemia de alienación vía satélite
Simplificación a lenguajes mediáticos
Una argolla electrónica para cada nariz
Tiaras
Y gangrena


RETRATO DEL ARTISTA EMBRUTECIDO

Páramos de lengua
Atisbando detrás de la torpeza decadente
Trazos tentativos que intentan sujetarse
Ante una presión atmosférica
Cada vez más rigurosa con sus articulaciones

Estalactitas colgando del bigote
Ojos yermos
Impiedad impía e impiadosa cómo decirlo más
Su expresión yerta
Incapaz de evitar su pulso
Recurrencias paronímicas

Temblores de abstinencias varias
Tendones disecados a punto para lonja
Gambitos ineficaces por extemporáneos
Flama que se ahoga en azules
Por exceso de combustible

Naturaleza muerta el espejo

Y unos cuantos versos,
Enumerativos de su amarga condición


AIRE DE MILONGA

                                                        Al abuelo Cebrián, dedico esta nadería

Afanes mercantilistas
Y muchas placas policiales sosteniéndolos
Por hache o por be
Diez horas por día frente a las computadoras
Pero hete aquí que hoy me encuentro
Con el cielo de Villa Elisa atenazando mi
garganta
Con pretéritos perfectos, quiero decir,
Con la plenitud del recuerdo
De cuando siempre era real
Ojos y cielo y terrenos y estacas
El silbido en tiempo de milonga
Única y efímera visión de tierra prometida
Creíste que me enseñabas a vivir
Y tan sólo estabas instruyéndome en su
contrario
Después de un hiato de cuarto de siglo
Te agradezco
Y hago de cuenta que el amor tuvo sentido
Y también de que ambos siempre lo supimos


VUELTA DE CORREO (a Amelia)

Tengo demasiado más de lo que podría haber soñado
No tengo absolutamente nada
El verbo tener implica primero un cuerpo
De ahí en más, para qué hablar
Por nota mecanografiada me agradece unas palabras
Que cierta vez pude transmutar
Y me dice que ayudarán a aliviar en sonrisas
Su tránsito al más allá
Y yo quisiera decirle que todos estamos en ese tránsito
Aunque tal vez sin esa aguda conciencia suya
Y que qué bueno que pueda sostener la sonrisa
Y expresarle a mi vez la gratitud
Por devolverme la evidencia
De que algunos fantasmas urden mejor
El tapiz de los trasfondos
Que por detrás de toda posesión
Laten los verdaderos vasos comunicantes
Y que el único terruño posible
Existe en el sueño de los desterrados


PENSAMIENTOS DISTALES

Tal vez la falange distal de mi índice
Haya sido un nefasto puntero señalador
Lo que sucede es que quise enfatizar
La empatía ontológica que debe existir
Entre el signo y lo designado
Lo congelado y su localización a eterno:
Falange media, proximal
Segundo metacarpiano, trapezoide,
Escafoides, cúbito, radio,
Húmero, clavícula, omóplato
Cervicales, cráneo
Siempre y siempre el mismo itinerario
Siempre la distal indicativa
Chirriando
Sobre los opacos vidrios
Del portal del mausoleo
Alertando vanamente a propios y extraños
Desatando huracanes de interpretaciones
Que en nada resienten la pureza del misterio
La cobardía intelectual
Del principio de no contradicción
Ni las dislocadas ansias de ver lo que hay ahí fuera


AGNUS NOSTER


Pensándolo bien, la idea de muerte es tautológica. El discernimiento flota como los palos de yerba en un mate lavado, poco y nada puede aportar dada su estructura de leñame ya seco y sin embargo filtrado de humedad en todas sus porosidades. Si se pierde de vista el objetivo final, que es precisamente situar en tiempo, lugar y forma al objeto, tal vez nuestros portaobjetos serían tan inclusivos que estaríamos allí devanándonos los sesos mientras a la vez nos observamos a escala 1/10.000. Dimensiones en crecientes o menguantes evanescencias finales, o al menos certezas que jamás podrán afirmarse en una estructura sin fondo ni sostén alguno. Tracción a sangre que se proyecta en angélicas rebeliones mitológicamente condenadas al averno, murciélagos intentando oír lo que nos está vedado ver, eso que nos pasa y está morfológicamente determinado en un molde tan abstracto como el sello que lo ha impreso. Tentativas de gallina ciega evitando el puchero fatal, ineludible como las luces y las sombras, como el aderezo perceptual con que se sazona la divinidad coprófaga. Final propio para una labor que comenzó preñada de impulsos caníbales para consigo misma en tanto una expresión más de los códigos de su propia especie.
El verbo se hizo carne. Intentemos la viceversa, devorándolo como él lo hace con nosotros.